La causa que explotó en el seno de la vida política de San Lorenzo sigue teniendo coletazos, no sólo en Tribunales Federales de Rosario, donde hoy declaraban en indagatoria los seis detenidos por trata de personas y venta de drogas, sino también en las imágenes que salieron a la luz en las últimas horas.
Se trata de fotos reveladas a través de Canal 3 donde muestran a Miriam Soto, alias “la Mamu”, ahora detenida y sindicada por la investigación judicial como la cabecilla de una organización ilícita, junto con dirigentes políticos de peso de San Lorenzo.
En una de las imágenes, que datan de tiempo atrás, se la ve junto al concejal Eduardo Ros (donde también está otra de las detenidas) y en otra junto al intendente Leonardo Raimundo, quien también aparece mencionado en la causa y los fiscales lo acusan de “encubrimiento agravado” entre otras cosas.
Las llamativas imágenes no son más que eso, ya que corresponden a un acto donde participaron los dirigentes políticos y no están incorporadas a la causa ni tampoco están siendo objeto de prueba alguna.
Los detenidos están acusados de conformar una banda en San Lorenzo que supuestamente, capta, traslada y explota sexualmente a mujeres, así como también vender drogas. Entre febrero del año pasado a la actualidad se detectaron al menos 16 víctimas de esta organización criminal.
De acuerdo a la información vertida por Rosario12, una de las mujeres que fueron captadas por la red contó que “Mamu”, a cargo del drugstore de Oroño al 800 donde se realizaron los allanamientos el pasado lunes, le hacía vender droga a los clientes. De acuerdo a su declaración, la bolsita de marihuana o cocaína costaba 50 dólares. La organización criminal, de acuerdo a la instrucción, estaría integrada por al menos 12 personas con lo cual el magistrado federal no descartó que se continúen con las detenciones.
Los fiscales Claudio Kishimoto, de la Fiscalía Federal 2 de Rosario, Alejandra Mángano y Marcelo Colombo, de la Protex, aseguraron que la organización funciona desde al menos febrero del año pasado. De acuerdo a la investigación, “Mamu” es quien tomaba las decisiones de los negocios, atendía a los clientes, cobraba y administraba tanto la plata proveniente de la explotación del kiosco-almacén y el prostíbulo, como también de la venta de estupefacientes. Sus hijas y la mujer identificada como Marisa V. impartían órdenes a las mujeres prostituídas y se encargan de la atención y el trato de los clientes a instancias de “Mamu”.