El pasado martes 5 de noviembre un colectivo de la empresa Tata Rápido volcó en el ingreso a la ciudad de Santa Fe. Allí viajaba una joven de la localidad de Monje junto a su pequeño hijo de cuatro años y ambos resultaron heridos.
El nene fue protegido por su mamá ante la violenta maniobra y sólo sufrió un corte, por lo que le dieron el alta rápidamente y se encuentra bien. Sin embargo, Vicky no corrió la misma suerte. Si bien en un comienzo se creyó que era un cuadro leve, con el correr de las horas se agravó.
La mujer había hablado con Info Más y manifestado que presentaba una fractura en su clavícula y dolores lumbares. Según confirmaron sus familiares a este medio, se encuentra en terapia intensiva y la evolución es muy lenta.
“El viernes la llevaron a hacer una tomografía de la zona pulmonar porque se le dificultaba para respirar. Tenía contusiones severas por el golpe. Estamos ahora en el Sanatorio San Jerónimo porque no era buena la atención en el Sanatorio Español, donde la querían operar a pesar de su dificultad para respirar”, afirmaron.
Por otra parte, confiaron que cuando ingresa al nuevo nosocomio los médicos identificaron la gravedad de las lesiones en los pulmones. “Tenía tres costillas fracturadas y la pasaron a terapia intensiva. La trataron con una máscara de oxígeno pero no respondió con eso y por eso la entubaron y llevaron a un coma farmacológico inducido para que puedan recuperarse los pulmones”, detallaron.
Mientras tanto, y a pesar del comunicado oficial que emitió la empresa, la familia de Vicky aseguró que a 10 días del hecho, nadie de la firma Tata Rápido se comunicó con ellos.
“Es un proceso muy lento, va evolucionando muy de a poco, recuperando la oxigenación, que es un buen síntoma. Por prevención le van a hacer una traqueotomía. Estaba teniendo un poquito de fiebre que aparentemente es una neumonía y hay que ir esperando la evolución. Son pequeños pasos”, finalizaron.