Alejo tiene ocho años y la valentía para donar médula ósea y salvar una vida, en este caso, la de su propio papá. El hombre de 27 años padece leucemia y que se encuentra internado en Buenos Aires.
Rodolfo Ferrero es de Puerto Gral. San Martín, vive junto a su esposa y dos hijos, Nahuel, de 2 años y Alejo, de 8. Hace dos años los profesionales de la salud le descubrieron la enfermedad y tras un tiempo de estar en buen estado y aparentemente recuperado, la enfermedad regresó.
Ahora, con la ayuda del mayor de sus hijos, y la aceptación de los profesionales, Rodolfo recibió la donación del pequeño quien fue internado, recibió dos vacunas diarias y se realizó los estudios correspondientes.
El pasado jueves, Alejo donó para su papá y en medio de su acto de generosidad, sostuvo que todos deberían donar para salvar a otras personas. Su abuela, en diálogo con Punto de Partida, indicó: “Siempre dijo que era fuerte y que su sangre era sanita y que él iba a darle a su papá para que se salvara. Nunca tuvo miedo”.
El pequeño guerrero tendrá que volver a donar en dos semanas para seguir ayudando a que su papá se recupere. “Voy a descansar y volver a donar sangre para que mi papá se salve, quiero que me llevé a pescar y a la isla cuando esté bien”.
Comentarios sobre post