Cuatro crías de lechuza fueron encontradas por una familia de Totoras que no dudaron en rescatarlas, ya que su madre estaba muerta cerca del nido. Desde el Área de Salud Animal se activó el protocolo de cuidado para luego, ser reinsertadas a su hábitat.
Días atrás, la familia se comunicó con el área animal de la Municipalidad para dar aviso que habían traído del campo a cuatro crías de lechuza de un campanario, también conocida como búho blanco, lechuza de galpón o lechuza de iglesia. La mama yacía muerta cerca del nido.
Ante esto y de manera inmediata, se activó el protocolo de cuidado y reubicación para brindarles la oportunidad de ser reinsertadas en su hábitat. “Agradecemos enormemente a Mariela Torres y Loanita por los primeros cuidados y a Daniel por trasladarla a la cátedra de Fauna Silvestre de la Facultad de Veterinaria en Casilda”, expresaron.
La lechuza de campanario es de hábitos nocturnos, puede andar solitaria o en pareja, balancea el cuerpo lateralmente cuando se siente amenazada. “Te recordamos que si tomas contacto con fauna silvestre en riesgo, no dejes de consultarnos, cuidemos nuestra fauna nativa”, pidieron desde el Área de Salud Animal de Totoras.